Estancado, el Servicio Profesional de Carrera

Por: EL UNIVERSAL/ MÉXICO, DF.

La Secretaría de la Función Pública admite que más de la tercera parte de los concursantes por una plaza en el Gobierno Federal no cubre el perfil o no aprueba los exámenes.

El Gobierno Federal desecha entre 72 por ciento y 86 por ciento de los aspirantes que no cubre perfiles o no aprueba exámenes de conocimientos, visión estratégica y liderazgo para integrar el Servicio Profesional de Carrera (SPC).

La Secretaría de la Función Pública (SFP) admitió que debe identificar e impulsar la suficiente participación de aspirantes a ocupar plazas en el Gobierno Federal por la vía del SPC para reducir el número de concursos desiertos.

“Una posible solución para disminuir el número de concursos desiertos, sin duda será identificar e impulsar la participación de suficientes aspirantes que cumplan con el perfil requerido en las convocatorias respectivas”, estableció la SFP.

De un total de siete mil 116 plazas publicadas de 2004 a la fecha al menos dos mil 684 fueron declaradas desiertas, lo que representa 37 por ciento de las ofertas de trabajo.

David Arellano, académico del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), identificó dos razones por las que se declaran desiertos los concursos al SPC:

El rechazo de la gente a participar o continuar en el proceso porque considera que es inequitativo o está tomada la decisión y, la segunda causa, la representan los concursantes que aparentemente no cumplen los requisitos.

Según la Secretaría de la Función Pública, 72 por ciento de los concursantes es rechazado por no cumplir los requisitos de perfil para el puesto; de los que aprueban el perfil, el 86 por ciento también es rechazado por el Gobierno en los exámenes de conocimientos, negociación, trabajo en equipo, orientación a resultados, visión estratégica y liderazgo.

Sin embargo, David Arellano precisó que los perfiles exigidos para los candidatos “son poco claros” y las razones para declarar desierto un concurso no son transparentes.

“Hay gente que no continúa en el proceso porque considera que ya fue predefinido, saben que están rellenando el concurso ante una decisión tomada y por esta razón se salen antes de concluir el proceso”, sostuvo.

El SPC fue creado en la Administración del ex presidente Vicente Fox como un mecanismo para profesionalizar el servicio público, evitar la desbandada sexenal, garantizar estabilidad laboral y sobre todo, como una forma de combatir la corrupción; comenzó a operar en abril de 2004.

De acuerdo con datos de la Dirección General de Ingreso, Capacitación y Certificación de la SFP, obtenidos mediante una petición de acceso a la información pública gubernamental, desde 2004 al 7 de febrero de 2006 se publicaron para concurso siete mil 116 plazas vacantes en los niveles de Enlace a Director General dentro de la Administración Pública Federal.

De ese global se declaró ganador en tres mil 702 casos, aunque “no se asumió el cargo en todos los casos”, informó la Función Pública. A juicio de David Arellano esto es lo más extraño: “la gente que gana el concurso y no se presenta. Sería interesante saber cuánta gente es. Y lo que sucede es que (el servicio profesional) quizá haya sido una de sus opciones de trabajo”.

La SFP añadió que declaró desiertas dos mil 684 vacantes (37.7 por ciento del total) y canceló 114 concursos; 616 siguen hoy en proceso.

De acuerdo con la Función Pública, “uno de los objetivos principales del SPC es contar con las mejores personas para desempeñar un puesto en el Gobierno. De esta forma la selección de los candidatos a ocupar un puesto dentro de las estructuras de la Administración Pública se hace mediante procedimientos rigurosos que atienden a disposiciones legales emitidas por el Congreso de la Unión”.

Por ello es que, sostuvo la SFP , “el primer paso que debe darse para ocupar una plaza es sujetarla a un concurso público y abierto, de forma tal que cualquier persona que esté interesada en trabajar en el Gobierno y que cubra los requisitos necesarios para desempeñar un puesto, puede inscribirse para participar”.

La información oficial establece que “existen muchas personas que les resulta atractivo trabajar en el sector público; sin embargo, no necesariamente cubren los requisitos o cuentan con las habilidades y experiencia necesarias para desempeñar el puesto de que se trata. Por ello, las personas que se registran en los concursos son sujetas a una revisión de cumplimiento de requisitos curriculares. En esta etapa son descartados, en promedio, el 72 por ciento de los aspirantes inscritos”.

Datos de la SFP establecen que una vez que se tiene el bloque que cumple los requisitos, viene una siguiente etapa en la que “son descartados, en promedio, el 86 por ciento de los aspirantes que acreditó los requisitos curriculares, identificándose que los exámenes técnicos son los que cuentan con mayor nivel de dificultad”.

Además se documentó las irregularidades del SPC, frente a lo que la Función Pública admitió que el servicio está en plena revisión y habrá ajustes porque han encontrado errores, baches y debilidades.